Las leches del tipo deslactosados son fuente de proteínas, vitaminas y otros minerales y además, no contienen conservantes y son bajas en colesterol. La leche deslactosada es un tipo de leche al que se le agrega lactasa para ayudar a digerir la lactosa. Aporta los mismos nutrientes de la entera y mantiene la misma cantidad de proteínas de alta calidad.